En Mayo del año 2012 Savener fue invitado a participar en un concurso Internacional promovido por Cajamar con la intención de seleccionar al equipo redactor de un nuevo edificio de Oficinas en Almería para albergar su Sede Central y a sus empresas participadas.
Savener, junto con estudio de arquitectos Almeriense, Arapiles Arquitectos, desarrollo una propuesta que después de varias fases durante la competición resulto ser la propuesta ganadora y finalmente el equipo seleccionado para el diseño del nuevo edificio.
Cajamar como promotor del proyecto había establecido con claridad la intención de llevar a cabo un edificio que supusiera un referente de la construcción sostenible en la zona y en general en España y que al mismo tiempo pudiera ser certificado por la prestigiosa y reconocida herramienta LEED del U.S. Green Building Council.
La solución planteada respondió a esta premisa pero al mismo tiempo y acorde al emplazamiento geográfico y la idiosincrasia social del territorio, ha alcanzado altos niveles de sostenibilidad pero con una inversión limitada (bastante más baja que para edificios de estas características) y con un alto grado de flexibilidad en cuanto a la distribución interna de los espacios.
El resultado final es un edificio que alcanza el grado de certificación LEED Gold pero que lo hace sin aspavientos, sin alardes tecnológicos, de manera discreta, sin dobleces, poniendo al usuario en el centro de la solución, aprovechando el microclima del emplazamiento y dotándolo de una elevada funcionalidad que permita cambiar los espacios interiores y adaptarlos a las diferentes empresas que lo ocuparán a lo largo de su vida.
El edificio además de los espacios principales destinados a oficinas cuenta con otros usos anexos como cafetería, guardería, gimnasio, áreas de descanso y esparcimiento, creando un conjunto final moderno y pensado para combinar el trabajo con el juego, la salud y el confort en general.
Los análisis térmicos, energéticos y fluidodinámicos llevado a cabo por Savener han condicionado la configuración de la envolvente y su forma final, al mismo tiempo la variedad de usos y la flexibilidad exigida ha llevado a un diseño pormenorizado de las instalaciones para adaptarlas a todos los escenarios a los que se tendrá que enfrentar.
El edificio hoy opera al 100% y los resultados obtenidos han sido mejores que los esperados en la fase de diseño y cálculo.